Lifshitz A

Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 0
Paginas: 149-150
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FRAGMENTO

La anécdota –ciertamente cómica– de la población italiana de Sellia, que declaró que estaba prohibido morirse (hay quien agrega que el castigo por infringir esa regla era precisamente la pena de muerte), trae la consideración de si las restricciones legales y reglamentarias son efectivamente un camino para la preservación de la salud. En realidad, la ordenanza 11 del 5 de agosto de 2015 de esa población señala la obligación de hacerse revisar una vez al año y que, de no hacerlo, se impondrán multas, pero la noticia trascendió a la prensa como que se prohibía morir.