2017, Número 2
Rev cubana med 2017; 56 (2)
Viejas y nuevas implicaciones de la relación médicopaciente y del método clínico
Espinosa BAD
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 0
Paginas: 150-154
Archivo PDF: 49.77 Kb.
FRAGMENTO
Los médicos cubanos hemos conocido y defendido el método clínico en nuestra práctica profesional durante largo tiempo, con mayor énfasis -sobre todo en sus aspectos teóricos y en su divulgación- a partir de la publicación del trabajo clásico de los profesores Ilizástigui Dupuy y Rodríguez Rivera cuando fue conceptualizado de manera original por ellos en el país a fines de la década de los años 80 del pasado siglo, y enriquecido luego por los aportes de muchos colegas. Desde entonces su enseñanza ha sido considerada la piedra angular de los planes de estudio de nuestra carrera en las universidades médicas. Debido a lo anterior, diversos aspectos sobre el método han constituido objeto central de múltiples actividades y publicaciones científicas entre nosotros. Al mismo tiempo se han señalado los riesgos de la, cada vez más evidente, crisis del método clínico que, según Moreno tiene como causas principales: el deterioro de la relación médicopaciente, el menosprecio de la clínica, la sobrevaloración de la tecnología y el desinterés por el generalismo.A estos factores se añaden nuevos elementos que intervienen en la enseñanza de estudiantes de medicina en las llamadas áreas clínicas -para que aprendan a "ser los médicos" que queremos y necesitamos en el futuro-,4 como es el reto de la llegada progresiva de jóvenes a nuestras universidades médicas en oleadas con características propias de una nueva y diferente generación. Son los llamados "nativos digitales", dominadores casi naturales, desde su infancia, de las tecnologías de la información, la informática y las comunicaciones y, por tanto, acostumbrados mucho más al audiovisualismo y a la industria cultural del entretenimiento, que preparados previamente con habilidades comunicacionales para establecer relaciones interpersonales, con pocos hábitos de lectura de libros, revistas y materiales impresos, escritura, con motivaciones y proyectos de vida no siempre bien consolidados y muy distintos de los de sus generaciones previas.