Cedillo ÁP

Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 5
Paginas: 3
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FRAGMENTO

Es posible que todos los lectores conozcan el libro al que se refiere el fragmento anterior, y es mi deber aclarar que fue colocado especialmente ahí, pues no se me ocurre mejor ejemplo de lo básico que es el seguimiento del método científico en nuestras vidas, que aquel que nos ilustra un niño con sus cuestionamientos.
Al igual que “El Principito”, los niños, en su afán por descubrir el mundo, toman un objeto, lo observan, desconocen el uso que se le da, pero en sus mentes elaboran teorías sobre ello y deciden ponerlas a prueba. Así, toman el objeto, lo golpean, lo usan como instrumento musical, se lo llevan a la boca, lo tiran al piso y, basados en estas circunstancias, escogen la que ellos creen que se ajusta mejor al uso del objeto.

REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)

1. De Saint-Exupéry Antoine. “El Principito”, Editora Latinoamericana, S.A., México, 1998. (fragmento modificado).

2. Periódico el Excélsior, 17 de enero del 2017. “Médico que solo sabe medicina, ni medicina sabe”. [en línea]. Dirección URL: .

3. Universidad Nacional Autónoma de México. Facultad de Ingeniería. [en línea]. Dirección URL: .

4. Real Academia de la Lengua. Definición de arte y ciencia de la RAE. [en línea]. Dirección URL: .

5. Bunge M. La ciencia, su método y filosofía, Ed. Sudamericana, 2014.