medigraphic.com
ENGLISH

Salud Quintana Roo

ISSN 2448-8720 (Impreso)
Organo Oficial de la Secretaria de Salud de Quintana Roo
  • Mostrar índice
  • Números disponibles
  • Información
    • Información general        
    • Directorio
  • Publicar
    • Instrucciones para autores        
  • medigraphic.com
    • Inicio
    • Índice de revistas            
    • Registro / Acceso
  • Mi perfil

2015, Número 32

Salud Quintana Roo 2015; 8 (32)


Dermatofibroma auricular secundario a colocación de piercing

Padrón-Arredondo G, Fernández-Amador JA
Texto completo Cómo citar este artículo

Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 18
Paginas: 18-21
Archivo PDF: 333.54 Kb.


PALABRAS CLAVE

neoplasias, pabellón auricular, perforación del cuerpo, histiocitoma fibroso benigno.

RESUMEN

Introducción. El oído externo está expuesto al medio ambiente y al trauma, y debido a su escasa vascularidad es sensible a las infecciones y enfermedades. La localización externa amplia, hace que estas patologías sean fáciles de diagnosticar y de tratar.
Caso clínico. Paciente femenino de 14 años de edad que presenta lesión auricular derecha de un año de evolución, la cual inició posterior a la colocación de un piercing de oro. La paciente presenta una tumoración sésil en la región superior del hélix no dolorosa. La paciente no tiene antecedentes de cicatrices queloides, patología inicialmente considerada o de fibroma. Se realiza exéresis de la tumoración, previa hemostasia de vasos nutricios, con cierre primario con inyección de corticoides local en el mismo sitio. Se envía el tumor a patología, el cual reporta dermatofibroma auricular.
Discusión. La colocación de piercing para el embellecimiento es comúnmente observado en las personas jóvenes, sin embargo, los riesgos inherentes a su colocación, como infecciones y cicatrices, son escasamente divulgados. El dermatofibroma, también conocido como histiocitoma fibroso benigno, es una de las lesiones del tejido blando cutáneo más comunes, y se presenta hasta en 3% de los tejidos enviados a histopatología. En esta paciente solamente se presentó una lesión asintomática y de lento crecimiento, que provocó que la paciente no requiriera de tratamiento hasta que la misma fue tan obvia que llamaba la atención, y por lo mismo solicitó su tratamiento definitivo. La paciente continúa bajo vigilancia para observar si recidiva.


REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)

  1. Orengo I, Robbins K, Marsch A. Pathology of the Ear. Seminars in Plastic Surgery. 2011; 25(4):279-287. doi:10.1055/s-0031-1288920.

  2. Sand M, Sand D, Brors D, Altmeyer P, Mann B, Bechara FG. Cutaneous lesions of the external ear. Head & Face Medicine. 2008; 4:2. doi:10.1186/1746- 160X-4-2.

  3. Boisclair S, Rousseau-Harsany E, Nguyen B. Jewellery- and ornamentrelated injuries in children and adolescents. Paediatrics & Child Health. 2010; 15(10):645-648.

  4. Purim KSM, Rosario BA, Rosario CS, Guimarães ATB. Piercings in medical students and their effects on the skin. Anais Brasileiros de Dermatologia. 2014; 89(6):905-910. doi:10.1590/abd1806-4841.20142878.

  5. Metts J. Common complications of body piercing. Western Journal of Medicine. 2002; 176(2):85-86.

  6. J, Sindhu BR. Pyogenic granuloma at ear piercing site: Report of a case. Indian Dermatology Online Journal. 2014; 5(3):347. doi:10.4103/2229-5178.137801.

  7. Lee TC, Gold WL. Necrotizing Pseudomonas chondritis after piercing of the upper ear. CMAJ : Canadian Medical Association Journal. 2011; 183(7):819- 821. doi:10.1503/cmaj.100018.

  8. Manca DP, Levy M, Tariq K. Case Report: Infected ear cartilage piercing. Canadian Family Physician. 2006; 52(8):974-975.

  9. Hanif J, Frosh A, Marnane C, Ghufoor K, Rivron R, Sandhu G. “High” ear piercing and the rising incidence of perichondritis of the pinna. BMJ : British Medical Journal. 2001; 322(7291):906-907.

  10. Cugno S, Rizis D, Cordoba C. Beyond the borders of keloid formation: A case report. The Canadian Journal of Plastic Surgery. 2011; 19(1):e10-e11.

  11. Alves JVP, Matos DM, Barreiros HF, Bártolo EAFLF. Variants of dermatofibroma - a histopathological study. Anais Brasileiros de Dermatologia. 2014; 89(3):472-477. doi:10.1590/abd1806-4841.20142629.

  12. Han TY, Chang HS, Lee JHK, Lee W-M, Son S-J. A Clinical and Histopathological Study of 122 Cases of Dermatofibroma (Benign Fibrous Histiocytoma). Annals of Dermatology. 2011; 23(2):185-192. doi:10.5021/ ad.2011.23.2.185.

  13. Chung J, Namkoong S, Sim JH, et al. Deep Penetrating Benign Fibrous Histiocytoma of the Foot Associated with Throbbing Pain. Annals of Dermatology. 2011; 23(Suppl 2):S239-S242. doi:10.5021/ad.2011.23.S2.S239.

  14. Kaur H, Kaur J, Gill KS, Mannan R, Arora S. Subcutaneous Dermatofibroma: A Rare Case Report with Review of Literature. Journal of Clinical and Diagnostic Research: JCDR. 2014; 8(4): FD01-FD02. doi:10.7860/JCDR/2014/6586.4204.

  15. Shin JW, Park HS, Kim BK, et al. Aneurysmal Benign Fibrous Histiocytoma with Atrophic Features. Annals of Dermatology. 2009; 21(1):42-45. doi:10.5021/ad.2009.21.1.42.

  16. Sampaio FMS, Gualberto GV, de Cerqueira FGM, de Cerqueira AMM, Treu CM, Vargas TJ de S. Case for diagnosis. Anais Brasileiros de Dermatologia. 2014; 89(3):519-520. doi:10.1590/abd1806-4841.20142507.

  17. Lee HI, Lee JW, Han TY, et al. A Case of Dermatofibroma of the Upper Lip. Annals of Dermatology. 2010; 22(3):333-336. doi:10.5021/ad.2010.22.3.333.

  18. Bittencourt M de JS, de Miranda MFR, de Parijós AM, Mesquita LB, da Fonseca DM, Jambo DAA. Dermatofibroma in a black tattoo: report of a case. Anais Brasileiros de Dermatologia. 2013; 88(4):614-616. doi:10.1590/ abd1806-4841.20131919.




2020     |     www.medigraphic.com

Mi perfil

CÓMO CITAR (Vancouver)

Salud Quintana Roo. 2015;8